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Una fianza es una cantidad de dinero que vincula una obligación legal a ser cumplida. Generalmente, durante un proceso penal, las fianzas funcionan como una compensación monetaria que vincula al acusado a una obligación legal para seguir su proceso penal en libertad condicional; es decir, una fianza se paga como una promesa para seguir dicho proceso fuera de un centro penitenciario, con la condición de acudir en tiempo y forma a todas las citaciones, así como seguir cumpliendo con todos los requerimientos que sean solicitados durante este proceso.
Los requerimientos, consideraciones, y parámetros que se determinan para otorgar libertad bajo fianza varían de un tribunal a otro, así como los cargos en contra del acusado, la gravedad de los mismos, el contexto sociopolítico, cultural y económico del mismo, e incluso el estado mental, la actitud presentada ante las acusaciones; y sobretodo, el historial de dicha persona, pues se considera si es que ha sido vinculado a otros procesos penales, si ha sido condenado por este u otros delitos, su carrera profesional, su estatus familiar, y su reputación en general.
Son muchos factores los que pueden influir en la decisión del tribunal para otorgar libertad bajo fianza a un acusado, así como las condiciones bajo las que se otorga dicha libertad, pues el tribunal tiene el poder para coartar la libertad del acusado de viajar, saliendo del país, estado, o inclusive del condado; revocar privilegios de licencias para posesión de armas, consumo de alcohol y otras drogas, y hasta ciertos servicios médicos, aunque la octava enmienda prohíbe las fianzas excesivas.
La gravedad del delito siempre será el factor principal que considerará el juez, así como si se atentó contra un grupo vulnerable o minoría. Estas dos atenuantes pueden incrementar la fianza y agravar las condiciones bajo las que estaría sujeto el acusado durante su proceso en libertad.
Luego de que su libertad bajo fianza haya sido considerada y deliberada a su favor por un juez, deberá cumplir con el pago de la misma en la fecha y formas estipuladas, el pago de la fianza será devuelto con las deducciones pertinentes por trámites administrativos y cuotas penales al término del proceso estipulado por las condiciones de la misma; existiendo también varias formas de acreditar el pago por dicha fianza, desde el pago en efectivo de la misma, la cesión de los derechos de propiedad sobre alguna propiedad que asemeje el valor de la fianza o lo complemente, e incluso firmar una garantía de que, en caso de incumplir las condiciones que se le impongan, acreditará el pago de la fianza, dicha garantía generalmente es del 10% del valor total de la fianza.
Todos estos requerimientos deberán ser cumplidos cabalmente, en tiempo y forma para que usted pueda disponer de su libertad.
Por todo lo anterior, es imperativo que cuente con un equipo legal experimentado, que conozca los procesos penales a fondo, y pueda garantizar que su libertad bajo fianza no se vea coartada por fallas en el proceso, arbitrariedades, o violaciones a la octava enmienda, siempre cumpliendo con las fechas y trámites del proceso.
Si usted se encuentra en un proceso penal o está siendo acusado de alguna, contacte hoy mismo al despacho de abogados Mendoza, nuestro equipo siempre experimentado y comprometido con obtener siempre los mejores resultados para su caso.
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