Denuncia por Acoso y Hostigamiento en Estados Unidos

Acoso y Hostigamiento

Nuestra realidad en el siglo XXI nos ha permitido reevaluar conductas que anteriormente se daban por hecho como algo aceptable y hasta natural, para desenredarlas y darnos cuenta de que siempre fueron acciones violentas que se normalizaron. El acoso y hostigamiento son un conjunto de conductas demarcadas dentro de distintas categorías, entre las cuales se encuentran el acoso laboral, político, sexual, hostigamiento público, entre muchas otras. Todas estas incluyen conductas inapropiadas, que pueden incluir amenazas de daño físico, psicológico u ofensas directas hacia usted o su entorno.

Las leyes de cada estado regulan y delimitan el acoso y los lineamientos para que cierta acción sea catalogada como acoso, además de que el procedimiento legal es diferente cuando se da una denuncia por acoso criminal, a cuando es una demanda civil. Por ejemplo, para que el acoso sea catalogado como criminal, debe existir una amenaza comprobable a la seguridad del afectado, su familia, o su propiedad.

¿Demanda Civil o Denuncia Penal?

En los casos de demanda por acoso u hostigamiento, el demandante no acusa de un crímen castigable como acoso, sino como una medida de prevención legal ante una molestia que puede surgir de diversas situaciones que se repiten, desde llamadas telefónicas de marketing, hasta extraños que merodean su propiedad. A diferencia de un caso penal por acoso criminal, esta demanda se ciñe a los lineamientos de la ley civil de un estado, y tanto los procesos como los juicios y sanciones son muy diferentes, pues una demanda civil normalmente desemboca en una orden de restricción, ya sea permanente o temporal; y un juicio penal puede incluir multas de cifras más altas, servicio comunitario, y hasta tiempo en prisión, dependiendo del estado y la gravedad de las acusaciones.

Ejemplos de Acoso Criminal

En Texas, por ejemplo, el estatuto de acoso criminal establece que el acoso ocurre cuando una persona actúa con intención de acosar, molestar, alarmar, abusar, atormentar, o avergonzar a otra, y entre sus ejemplos, algunas conductas específicas son:

• Iniciar comunicación y hacer un comentario, sugerencia o propuesta de índole obsceno
• Amenazar de cometer algún daño o crimen en contra de otra persona, su familia, o su propiedad
• Llama por teléfono constantemente, colgando o desconectando la llamada
• Rastrea constantemente dispositivos o propiedad de otra persona

Todas estas conductas son categorizadas como delitos menores de clase B. La sentencia incluye hasta 180 días en prisión, y una multa de hasta $2,000 dólares. Puede escalar a ser de clase A cuando el acusado cuenta con antecedentes penales o violó una orden de restricción civil, así como cuando la víctima es menor de edad, acarreando tiempo en prisión hasta por un año y una multa de hasta $4,000 dólares.

Obtenga Ayuda Legal

Sin importar el escenario, un juicio penal por acoso es un auto grave con implicaciones mucho más allá de multas o tiempo en prisión, pues su reputación podría verse comprometida severamente. En estos casos, siempre es de suma importancia contar con un equipo legal especializado, que junte toda la evidencia y junto a usted, establezcan una estrategia integral que garantice el mejor resultado. Contáctenos hoy para tener una representación legal adecuada.